Pelillo atorado

Jorge estaba tecleando alegremente en su computador cuando de pronto sintió un raro invasor en uno de sus ojos; dejó la escritura a un lado, tomó riendas en el asunto, y miró con suma atención hacia el espejo ajado que tenía en su descuidado baño. Y en efecto, ahí estaba el asunto que le concernía: …

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Cuerpo tomado

Un pie níveo, susurrante, pasmado sobre el gélido suelo... El cuerpo anquilosado de una mujer, que con dificultad podía permitirse arrastrar su cuerpo hecho un retortijón macabro, ya un ojo se había salido de su cuenca y la sonrisa de su otrora bella cara dejó de ser suya. Pasaban las tres de la madrugada, y …

El libro de las respuestas

Que la muerte sea un proceso inevitable y natural, ha sido la quid para algunos filósofos que estudian la entropía, un misterio de la finitud de nuestras vidas que a la inversa no puede funcionar, por eso es algo a lo que temer. Sin embargo, la falta de la decadencia puede volver loca a la …

¿Y dónde quedó el timón?

¡Por fin! ¡Hemos divisado tierra! Llevábamos meses a la deriva, perseguidos por las tempestades del océano y sus criaturas hostiles. Sin agua limpia ya, y de comida roedores que criamos con desechos, llegamos a nuestra anhelada meta… Al coste de muchos de nosotros que dejamos en el mar, flotando inhertes en el cementerio azul. El …

Un triste relato desde el cadalso

Por días he contemplado a la gente ir y venir por la plaza. Cuando se pasean junto a mí escucho sus conversaciones y los observo, incautos, mientras actúan como si yo no existiera. Ayer, un vagabundo defecó frente a mis ojos y la noche anterior un ebrio y una prostituta follaron debajo de donde me …

… la misma moneda

En el caudaloso mundo de las maravillas y tempestades del Espacio de la Tortuga… Dos aventureros merodeaban en un bosque encantado lleno de criaturas demenciales, que prefirieron mantenerse en sus retorcidos escondites, así para después llegar a las mazmorras Sin Nombre. Eran Mirth y Jax. Sin dudarlo mucho, bajaron las pedregosas escalinatas naturales, encontrándose con …

Nos observan

Estuvimos toda la noche discutiendo lo sucedido, y cada pormenor me causó un estremecimiento que, sin dejar de mirar a la vela menguante y a mi interlocutor, vi que el mundo se volvía más oscuro e inhóspito ante mis ansiosos ojos. Así fue, así lo vivimos, una noche escandalosa y llena de locura, perdiendo la …

Los dioses ocultos

Él era todo un tirano enterrado en el sótano de mi casa, volviéndose el nuevo rey del lugar. Yo, mirando a las tinieblas de mi cuarto, me anegaba en pensamientos oprobiosos al escucharlo, sin entender palabra alguna de las que decía. Pero sabía bien lo que quería. Lo que quería era sangre y muerte. Alguna …

Fantasmas

—No sirve de nada que finjas no escucharme. Aquí estoy. Me ves y me oyes —por unos momentos guardó silencio—. Sabes bien que no me voy a ir… No nos vamos a alejar nunca de ti. A través de la puerta de cristal del balcón, miró hacia adentro del departamento. Efectivamente, todos estaban ahí, en …

Tlahuelpuchi

    Las risitas me despertaron en aquella noche y me impidieron atrapar al dragón con mi barco turquesa volador; sus velas eran frondosas, de un marfil de los dioses, y su timón de obsidiana, que solo un capitán como yo podía guiar. Un repentino ventarrón llegó y las cosas en un rojo carmesí se …

Malleus Maleficarum

Escucho los gritos de odio, las palabras humillantes. Escupitajos, trozos de mierda y pedradas en mi cara. Sentenciada por ser consorte del Demonio, por fornicar con Él. El calor se vuelve insoportable, las llamas lamen mi piel. Oraciones para guiar a mi alma al seno del Señor. Sentenciada por ser consorte del Demonio, por fornicar …

A pesar de los dioses […], seguiré existiendo

    Estábamos hambrientos, tan escuálidos como unos crustáceos. El vaivén del mar nos acurrucaba en su lento y mortecino baile. Nos tomamos de las manos, quitándonos la pena por ser hombres y viejos marineros. Nada podía darnos esperanza aquella infeliz noche, porque era la de nuestra muerte. O la de algunos. El capitán estaba …

Murallas invisibles: Parte 2

    Ya los vivos no son tan recurrentes. Supongo que se cansaron de mí. Rayos, ¿dónde estoy y para qué estoy aquí, acorralado entre sombras y madera vieja? Si hay algún Dios, le digo firmemente que se joda junto con todos sus poderes divinos. Al diablo con todo eso. ¿Pienso, yo que soy ateo, …

Murallas invisibles: Parte 1

Suspiros… Probando, probando… Vale. Esta cosa todavía funciona. Y bien, estamos a tal año, no recuerdo el día, pero creo que es mayo. Llevaba tiempo sin grabar nada, me la pasaba viendo al techo o imaginando nubes, algo que fuera claro y límpido. Nada como aquí, no como este lugar; perdido en el tiempo y …

El inquilino

Con su mirada clavada en mí, sus ojos totalmente abiertos como si no tuviera párpados, seguía cada uno de mis movimientos sin siquiera mover, ni un milímetro, la cabeza. Estaba parado, completamente rígido, con su espalda pegada a la pared. Al dar vuelta en el descanso de la escalera noté su presencia; justo al final …

El ruido está en nosotros: Epílogo

  Ese hijo de perra estaba frente a mí y lo primero que hice fue darle un golpe en la cara. Error mío, porque inmediatamente lo bloqueó y después me sojuzgó sobre el suelo. Parecía sorprendido por mi reacción. —Calma, idiota, no quiero hacerte daño. Sudaba mucho, a chorros. Sentía la boca seca. Miré hacia …

El ruido está en nosotros: Parte 4

  Una sirena, mucho ruido. Mis labios temblaban, gotas saladas pasaban por mi piel trémula. Si los espacios de un lugar pudieran ser enemigos vivos, acechándote de esquina a esquina, buscando tus peores suertes, en esta Walkyria todo parecía hostil, augurando mortíferos presagios en un templete de acero y hierro con una luz rojiza de …

El ruido está en nosotros: Parte 3

  Paralizado y aterrado, los segundos que pasaron fueron eternos, mientras aquellos cuerpos purulentos se acercaban lo suficiente para tomarme y lentamente despedazarme; sin embargo, dos rayos azules impactaron en sus cabezas y de inmediato cayeron al suelo. Era Freddie, con el rifle de Elfdred. Cuando pude respirar de nuevo, lo saludé y le di …

El ruido está en nosotros: Parte 2

  Desde de que el pleito entre nuestro egos se dio, yo no estuve de acuerdo en sacarlo de la cápsula, sin embargo, y a pesar de las protestas y mi cara larga, Elfdren sostuvo la iniciativa de que era necesario interrogarlo lo antes posible. Claro estuvo el asunto que nomás quería exponer que sus …

El ruido está en nosotros: Parte 1

  Acababa de salir del baño cuando llegamos al objetivo. La alarma, la intuición, aquella premonición de que algo maravilloso iba a pasar…      Era impresionante. Una nave enorme, no tan bella como las fragatas de la Unión, pero aquella magnitud en su largo, ancho y alto la hacían una titánica obra maestra para …